¡Ya falta menos para la ansiada 37ª edición de la Copa América en Barcelona!

El próximo verano de 2024 tendrá lugar en Barcelona la celebración de la Copa América (oficialmente ‘America’s Cup’). 

La primera vez que participé en el asesoramiento legal en el ámbito regata de veleros oceánicos de alto rendimiento fue en la ‘Volvo Ocean Race’ 2011-2012 (hoy ‘Ocean Race’), con salida en Alicante. Fue de la mano de la empresa multinacional de calzado ‘Camper’ que, por primera vez, se convertía en patrocinador oficial del legendario equipo neozelandés ‘Team New Zealand’, equipo de vela del Club ‘Royal New Zealand Yacht Squadron’ (RNZYS), liderado por el mítico Grant Dalton y con base en Auckland (Nueva Zelanda). La embarcación, bautizada como ‘Camper’, patroneada por el gran Chris Nicholson, fue construida por el astillero ‘Cookson Boatbuilders’ en Auckland (NZ). 

Posteriormente, también participé en el patrocinio de ‘Camper’ al ‘Team New Zealand’ en su participación en la 34ª edición de la Copa América, celebrada en 2013 en San Francisco. La embarcación ‘Aotearoa’, catamarán de la clase AC72, desafió sin éxito en la final al defensor del título, el ‘Oracle Team USA’, del ‘Golden Gate Yacht Club’ (GGYC). 

Actualmente el ‘Team New Zealand’ ostenta el trofeo de la America’s Cup, conquistado en aguas de Auckland (Nueva Zelanda), en su 36ª edición celebrada en 2021. En esa ocasión, con su embarcación ‘Te Rehutai’ un monocasco AC75 de 23 metros de eslora defendió con éxito su título de 2017 para el RNZYS, frente al italiano ‘Luna Rosa’ del ‘Circolo della Vela Sicilia’ (CVS), con sede en Palermo, Sicilia. En Barcelona, los kiwis volverán a defender el título, veremos ante quien de los otros cuatro challengers: ‘Ineos Britannia’, ‘Alinghi Red Bull Racing’, ‘Luna Rossa Prada Pirelli’ o ‘American Magic’.  

Faltan poco más de 500 días para que podamos disfrutar de nuevo, esta vez en la ciudad condal, de este grandísimo espectáculo mundial, sin duda la competición de vela más importante del mundo y, según algunas fuentes, el tercer evento deportivo con mayor impacto económico para el país anfitrión, después de los Juegos Olímpicos y el Mundial de fútbol.